domingo, 21 de marzo de 2010

¿Estamos vivos o muertos?

Estimados:

Buenos días, gracias a Dios porque nos permite ver más allá de lo que está delante de nuestros ojos físicos por medio de la fe en Cristo Jesús.

El mundo en general solo ve lo que esta delante de sus ojos, ellos viven sus vidas en torno a lo terrenal o sea ponen todas sus fuerzas, amor, dedicación, fidelidad, preocupación y entusiamo en las cosas perecederas de este mundo.

Les doy un ejemplo, yo amo a mi familia, amo a mi esposa e hijas, pero soy muy conciente que un día no va a existir más el vínculo de marido y mujer, padre e hijas, por lo tanto a pesar del gran amor que les tengo, no se compara al amor que debo tener hacia Dios. Mi vida no debe girar en torno a ellos, sino en Dios, porque sino mi vida se puede perder junto a ellos.

Lo que quiero que entiendan es que nada de lo que podamos lograr o tener en este mundo debe ocupar un lugar de importancia en nuestro corazón, porque si vivimos concientemente que todo eso un día se acabará, viviremos siempre con los ojos puestos por la fe en lo que es eterno, en la promesa de una vida nueva junto al Señor por los siglos de los siglos.

Nos alegremos por las dádivas de este mundo con medida, porque ellas verdaderamente nos dan alegrías momentáneas y es también de la voluntad de Dios bendecirnos en este mundo. Si obtengo algo en este mundo por añadidura digamos "Señor muchas gracias" y por nada debemos cambiar nuestra manera de conducirnos en este mundo.

¿Alguna vez has mirado hacia atrás en tu vida? Si no lo has hecho, hazlo y verás la misericordia de Dios para contigo, porque viviendo en ignorancia eras muerto y si en ese preciso instantes hubieses muerto, ¿a dónde hubieses ido a parar?

En cuantas circunstancias podrías haber muerto y cuantas de las enfermedades mortales que andan destruyendo en el día y en la noche te podrían haber alcanzado.

Sin embargo hasta el día de hoy has llegado sano y salvo solo por pura misericordia de Dios, ¿seguiré igual?

¿Cuantos en este preciso momento están muriendo y lléndose directo al infierno?

Hoy te has levantado con mucha fuerza, lleno de ganas de hacer todas tus cosas y planes, aparentemente está todo bien en tu vida, ¿te has detenido a pensar si para Dios estás vivo? Quizás hoy te sientes con alegría por una prenda de ropa costosa que te compraste, o por algo que conquistaste, quizás tu corazón rebosa de alegría ya imaginando lo bien que lo vas a pasar el próximo fin de semana junto a tus amigos en las reuniones que tienes por acostumbrado ir.

Pero quizás esa alegría que siente tu corazón es solo por las cosas terrenales, pero no por estar vivo delante de Dios.

Puede que estés muerto y andas caminando y sonriendo sin darte cuenta, pero te alegras que el sábado vas a reunirte en tu iglesia en el grupo jóven y que el domingo vas a recibir un devocional para leerlo y edificarte.

Desde que he nacido he pasado por tantos problemas, luchas y peligros que miro ahora y digo ¡Señor gracias por tu misericordia! porque te ha placido que llegue hasta el día de hoy para conocer tu voluntad, mientras otros han quedado en el camino y perecieron, con ropas de marcas, con autos nuevos, con casas lujosas, con mucho dinero, con muchas amistades y con familias numerosas, pero yo sigo aquí y tu también.

Pero Dios no nos ha amparado hasta hoy para que vivamos como antes en desobediencia, sino en conocimiento de su voluntad.

Voy a citar un pasaje que me hizo trasladar paralelamente a lo que fué todo el camino de mi vida hasta hoy, espero que Dios pueda hacerte ver su gran amor.

"Había un hombre rico, que se vestía de púrpura y de lino fino, y hacía cada día banquete con esplendidez. Había también un mendigo llamado Lázaro, que estaba echado a la puerta de aquél, lleno de llagas, y ansiaba saciarse de las migajas que caían de la mesa del rico; y aun los perros venían y le lamían las llagas" (Lucas 16:19-21).

En el inicio de esta parábola el Señor muestra dos personas en este mundo, iguales a nosotros, uno de ellos era rico, estaba bien económicamente, quizás igual que tu en este preciso momento, él se vestía con ropa fina y cara, quizás igual a tu, por ahí has sido muy pretensioso con estas cosas, particularmente en mi pasado yo lo fuí.

Seguramente este hombre tenía su religión, porque en el pasado todos eran muy religiosos y decían creer en Dios, quizás como tu, porque perteneces a una iglesia o a una denominación, como yo en mi pasado tenía mi religión, primero por imposición y despues por ignorancia.

¿Qué hubiese sido de mi si en ese momento de mi vida hubiese muerto? Porque de cierto en ese momento no me faltaba nada materialmente hablando, vestía la mejor ropa,tenía mi religión y ritos, la respuesta es con un nudo en la garganta ¡El infierno era mi destino directo! Solo la piedad de alguién tan grande como Dios me puede haber sostenido todo ese tiempo.

Te pegunto a ti, ¿Qué hubiese sido de ti en aquellos tiempos si hubieses muerto?

Porque pienso y veo que no ha sido corta mi vida hasta aquí, sino que hubo tiempo suficiente para ser destruído, porque nuestra vida sin Dios es como una vela encendida que va consumiéndose hasta apagarse, naturalmente esto ocurre con una vela y solo un milagro puede mantenerla encendida por años, porque solo dura unas horas.

Hermanos, el hecho de que hasta hoy estamos vivos es una muestra de la piedad de Dios y de su poder.

Este hombre rico hacía banquete con esplendidez todos los días, o sea vivía de fiesta en fiesta con sus amistades, quizás igual a ti, me acuerdo como salía casi todos los días a "divertirme". ¿Te has puesto a pensar que en cuantas de esas reuniones Jesús podría haber venido de repente? En medio de tus alegrías el espanto te podría haber alcanzado y solo hubieses escuchado ¡Apartaos de mi maldito al fuego eterno!

Pero también había un hombre pobre, un mendigo que no tenía ropas espléndidaz, no tenía comida, no tenía amistades y mucho menos podía hacer banquetes.

En este parábola veo en Lázaro a los cristianos, ellos para el mundo eran considerados pobres, pero eran ricos espiritualmente y enriquecían a muchos, ellos eran considerados como que no tenían nada, cuando en realidad lo poseían todo, ellos eran considerados como muertos, pero estaban vivos para Dios. Digo esto con certeza, porque claramente la condición económica no te hace salvo. En el hombre rico veo a los falsos cristianos, quienes aman las cosas del mundo, quienes sirven a sus propios deseos, quienes se deleitan en sus conquistas materiales, más están muertos delante de Dios.

Generalmente a los cristianos falsos y a los mundanos estas tres cosas los hacen felices; tener ropa cara, tener muchas amistades y tener prosperidad material.

Lázaro el mendigo no tenía estas cosas, pero sí tenía la verdadera alegría de ser fiel a Dios, por eso hermanos, debemos contentarnos con lo que tenemos y si Dios nos bendice debemos ser siempre íntegros a Él.

Cuando nos convertimos, para el mundo de falsos creyentes somos vistos como pobres, porque nuestros intereses no son los mismos que el de ellos porque nuestra vida y alegría no gira en torno a las cosas de este mundo como la de ellos, sino en Dios.

Si tenemos gracias a Dios y si no tenemos gracias a Dios también, porque él sabe cuidar de los suyos. Si encuentras a Cristo, has encontrado la verdadera y única riqueza que debes tener.

Sigamos con la Biblia.

"Aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado" (Lucas 16:22).

Hermanos el fin es para todos en este mundo, veo algunos que se aferran tanto a las cosas de aquí como si fueran a verlas y tenerlas por toda la eternidad.

En medio de la vida de estos hombres aconteció que ambos dejaron este mundo,me imagino como todas las alegrías de este hombre rico en un segundo se esfumaron y todo lo que quizá planeaba para el día siguiente quedó truncado, en un segundo pasó a vivir en otro lugar, eso sí, no pudo llevar sus ropas finas, sus banquetes, sus bienes, sus amistades, ni sus familiares.

¿Tienes idea como es el lugar que nos espera si estamos muertos sin Cristo?

Desde que has nacido, ¿cuantas veces te pudo haber acontecido lo que a este hombre rico en su misma condición? A muchos ya les ha acontecido, incluso a muchos que conoces.

Este hombre rico supuestamente con todas las cosas incluyendo el "ser creyente" fué sepultado. Si bien no especifica su edad la Biblia, pero al ser un hombre nos podemos imaginar que sus años tenía, durante toda su vida Dios tuvo piedad de él, pero este hombre jamás le importó la gracia de Dios, porque su corazón rebosaba de alegría por cosas externas. Al igual que a ti y a mi, Dios le brindó muchas veces la oportunidad de pasar de muerte a vida, porque de cierto un día la piedad de Dios se corta y te puede sorprender en un abrir y cerrar de ojos.

"Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno" (Lucas 16:23)

Esto es terrible, una vez que partimos de este mundo no hay vuelta atras, no hay otro destino que el infierno.

Entonces vemos que este hombre teniendo religión, prosperidad, amistades, ropas finas, las mejores comidas y la popularidad del mundo, fué condenado.

Cuantas personas están en esta misma condición aún siendo parte de una iglesia, teniendo prosperidad, amistades, títulos, si mueren hoy el destino es el mismo que el del hombre rico.

Uno de los peores tormentos que se experimentará en la perdición es el remordimiento de cociencia, ¿no te ha pasado alguna vez que alguién te aconsejo algo y no hiciste caso y despues las consecuencias fueron terribles? La angustia que uno siente es terrible, porque despues de que ya el efecto destructor impacta en nuestras vidas, decimos ¿cómo no hice esto o aquello? queremos volver atras para emendar aquella mala desición.

El hombre rico estando en tormento alzó sus ojos y vió al mendigo en un lugar de reposo que es el paraíso, me imagino todo lo que pasa por la mente de aquellas personas que vivan esta destrucción, no hay angustia que se pueda comparar, porque alguién un día te ha hablado y no escuchaste, sino que te jactaste de tenerlo todo y derepente te das cuenta que no tienes nada y lo peor es que nos vamos a arrepentir por toda la vida, pero sin tener más oportunidad, estamos en llamas que nunca apagarán.

Este hombre no es mejor ni peor que tu y yo, somos los mismos miserables que necesitamos urgente del Señor, la vida de ese hombre transcurrió al igual que la nuestra desde que nacimos, solo que a él se le cortó y a nosotros todavía no. Él vivió muchas de las cosas que nosotros hemos vivido, quizás hasta hoy cuando miramos para nosotros tenemos una vida casi igual a este hombre, por eso es tan real este mensaje para cada uno de nosotros.

El Señor nos quiere mostrar el verdadero sentido de la vida que es Jesús.

Aprovechemos para que el hilo fino que hasta ahora nos sostiene venga a convertirse en un fuerte lazo que nos une a Dios por medio del Espíritu Santo.

" Entonces él, dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua; porque estoy atormentado en esta llama" (Lucas 16:24)

Dando voces, claro signo de desesperación, encima del remordimiento por no escuchar ahora se está quemando en una poderosa llama, ¿alguna vez te quemaste? no podemos soportar ni un segundo delante del fuego, si nos paramos cerca de una llama el calor que se siente es terrible que tampoco lo soportamos, nos quemamos y sentimos que nos ahogamos sin poder respirar, imagínate entonces estar en medio de una llama terrible de por vida, porque la ira y el poder de Dios ha preparado este castigo en el cual no se consumiran jamás los que caigan en ella, sino que por los siglos de los siglos serán quemados, sentiran las llamas quemándolos, ahogándolos.

Dios mío, por eso será el lloro y crujir de dientes ¡Qué terrible esto porque si nos quemáramos aquí sufriríamos unos instantes hasta morir y no sentir nada! Pero así es de por vida!!

Este hombre desesperado pida que se le refresque aunque sea la lengua,¡imagínate entonces! El pide misericordia, pero ya no hay más piedad de Dios en ese lugar, porque así como nuestro Señor Jesús cuando estaba clavado en la cruz sintió la terrible experiencia de separarse por completo de Dios por cargar con toda la ira del Padre sobre él, así en ese lugar el sentimiento de que fuimos excluídos del Reino de Dios será terrible y si el Señor rogó al Padre en tres ocasiones que pasara esa copa de ira de él ya sintiendo en su carne que casi sería imposible de soportar, que nos queda a nosotros pobres criaturas miserables.

" Pero Abraham le dijo: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también males; pero ahora éste es consolado aquí, y tú atormentado.Además de todo esto, una gran sima está puesta entre nosotros y vosotros, de manera que los que quisieren pasar de aquí a vosotros, no pueden, ni de allá pasar acá"(Lucas 16:25-26).

La respuesta es tajante, acuérdate que recibiste muchos bienes en vida y que ellos te dominaron, te hicieron dormir y te mataron, mientras que Lázaro males, este de males lo traduzco a tomar la cruz, negarse a si mismo e ir en pos de Jesús, mientras los bienes del rico es todo el circo que el falso cristianismo ofrece.

Entonces comprendemos que nada de este mundo nos dará la salvación ni con nada de este mundo podremos comprar la salvación, si Dios te da bienes en esta vida, ubicalos en un segundo plano, sepúltalos de inmediato, da gracias y sigue con gran diligencia buscando el reino y su justicia.

Hermanos una vez en el infierno no hay forma de salir, nos fatigaríamos eternamente buscando la salida sin hallarla.

"Entonces le dijo: Te ruego, pues, padre, que le envíes a la casa de mi padre, porque tengo cinco hermanos, para que les testifique, a fin de que no vengan ellos también a este lugar de tormento" (Lucas 16:27).

Esta parte es muy triste, imagino estar en ese lugar de dolor y todavía tengo familiares vivos en la tierra, pero no tengo manera de volver a ellos para hablarles.

La hora de creer es ahora, ¿qué vamos a esperar? a partir de este momento o crees o dudas, la fe o la duda se encargarán de fijar tu destino, pero recuerda, una vez ahí no podrás volver más.

"Y Abraham le dijo: A Moisés y a los profetas tienen; óiganlos. El entonces dijo: No, padre Abraham; pero si alguno fuere a ellos de entre los muertos, se arrepentirán. Mas Abraham le dijo: Si no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se persuadirán aunque alguno se levantare de los muertos"(Lucas 16:29-31).

Tú tienes a pastores verdaderos que te predican el Evangelio, y si no los tienes, tienes la inalterable Palabra de Dios, sino la tienes ve corriendo y adquiere una, porque en ella está la vida. Tú tienes a hermanos sinceros que con sencillez llevan el evangelio. ¡Oye la palabra de Dios!

También vemos otra verdad muy triste, que muchos no creerán ni aunque se levantare un muerto del infierno y les hablare, pero tú que lees cree por favor.

Tú puedes ser ese hombre rico, con pecados semejantes, no importa a que denominación pertenezcas, lo importante es el verdadero arrepentimiento y fidelidad.

Pidamos perdón, nos volvamos a Él que nos ha sostenido todos estos años aún sin merecerlo, de cuantos peligros nos ha liberado, cuantas bocas de leones que son los demonios ha cerrado, cuantas flechas mortales el Señor ha detenido, cuantas pestes destructoras el Señor ha reprendido.

¡Oh mi Señor! ¡Cómo nos has cuidado!, ¡quienes sómos oh Dios para que nos muestres tu verdad!.

¡Por favor enséñanos a obedecerte!

¡Señor líbranos de este día!

"Aullad, porque cerca está el día de Jehová; vendrá como asolamiento del Todopoderoso. Por tanto, toda mano se debilitará, y desfallecerá todo corazón de hombre, y se llenarán de terror; angustias y dolores se apoderarán de ellos; tendrán dolores como mujer de parto; se asombrará cada cual al mirar a su compañero; sus rostros, rostros de llamas" (Isaias 13:6-8).

"He aquí el día de Jehová viene, terrible, y de indignación y ardor de ira, para convertir la tierra en soledad, y raer de ella a sus pecadores. Por lo cual las estrellas de los cielos y sus luceros no darán su luz; y el sol se oscurecerá al nacer, y la luna no dará su resplandor. Y castigaré al mundo por su maldad, y a los impíos por su iniquidad; y haré que cese la arrogancia de los soberbios, y abatiré la altivez de los fuertes" (Isaias 13:9-11).


Que Dios los bendiga!

No hay comentarios: